[Ramiro Francisco Helmeyer Quevedo] Habitaciones que brindan seguridad

Del pánico a la seguridad de vivir bien.

[Ramiro Francisco Helmeyer Quevedo] - Detrás de las paredes está la salvación.

Más que una moda... la seguridad no tiene precio 

[afirma Ramiro Francisco Helmeyer Quevedo].

Kim Kardashian, para muchos la más mediática de su estirpe, no se recupera del fuerte robo que sufrió en París meses atrás. 

Según reportan expertos de seguridad, ligados al medio del espectáculo, la mayor de las Kardashian mandó a construir una habitación del pánico en su mansión, ubicada en  Bel-Air - Los Ángeles y en la cual habitan su esposo (Kanye West), y sus dos hijos (North y Saint).

In Touch Weekly, revista especializada en el mundo de la farándula, señaló que para sentirse más segura, Kim Kardashian gastó más de 100 mil dólares. 

El cuarto de seguridad contará con baños y muchas cámaras. Será tan fuerte que incluso podría soportar un terremoto de 7.0 grados. Eso sin contar que Kanye West contrató a una empresa que protege a funcionarios públicos en países que están en guerra para que se encarguen de cuidar tanto a su esposa como a sus dos hijos.

Si tienes miedo ponte a la moda

Jorge García, gerente de Select Global Security en España, indicó que esta habitación o cuarto seguro, como se le conoce también, es un espacio creado para que una familia pueda esconderse ante la sospecha de extraños en su hogar.

Este cuarto tiene teléfono fijo y celular con cobertura directa a la estación policial. Además de un generador de electricidad, encargado de hacer funcionar el sistema de ventilación, así como monitores que controlarán las cámaras que tenga la residencia.

Estados Unidos fue "el papá" de estos inventos. La mayoría de las habitaciones del pánico tienen un sistema de megafonía para que el propietario hable, si lo desea, con los asaltantes; esto con la finalidad de proteger a los que allí habitan hasta que lleguen los cuerpos policiales.

Aunque no hay cifras concretas, expertos en seguridad afirman que el precio de las habitaciones del pánico oscilan entre los 6.000 y los 60.000 euros; por lo que no es de extrañar que el ciudadano común opte por correr o esconderse debajo de la cama ante un posible asalto.

[Por Ramiro Francisco Helmeyer Quevedo].